lunes, 31 de mayo de 2010

Río de negocios


No es novedad que los intereses económicos con sus negocios inmobiliarios prevalezcan frente a la preservación de los espacios públicos. Situación que se repite una y otra vez en diferentes puntos del país.
Uno de los pulmones verdes más extensos de la zona norte del conurbano bonaerense corre esta suerte, o desgracia. En Vicente López una resolución de su consejo deliberante estipula la creación de un vial costero y permite la construcción de un casino, un centro de convenciones, un shopping y edificios de más de 18 pisos.
Los vecinos agrupados en la Asamblea de Vecinos de Vicente López junto al defensor del pueblo de la nación demostraron irregularidades en los permisos de obra que solicita vialidad nacional al no constar del estudio de impacto ambiental.




La preocupación de los vecinos es la reducción del 50 por ciento que se hará del espacio verde, reduciendo unos de los mayores pulmones de ese lado de zona norte.
La asamblea respalda sus reclamos con las resoluciones de la Organización Mundial de la Salud de Naciones Unidas y la ley número 8912/77 que estipulan que las ciudades deben tener 10 metros cuadros por cada habitante.



Vicente Lopez es una localidad que no cuenta con ese espacio verde, a penas alcanza los 0,67 m2 por vecino. Dada esta situación este caprichoso proyecto del intendente García se sumará una ves más al incumplimiento de estas normas y sobretodo en detrimento del aire que respiran sus votantes.



 *Foto: Vecinos reprimidos en Laprida y el río.


 

Por la tierra y para la tierra



Ocho días caminaron, atravesaron el país hasta la Plaza de Mayo. Miles de miembros de treintas comunidades aborígenes trajeron sus reclamos a la presidenta Cristina Fernández. El pasado jueves 20 representantes de cada pueblo originario se reunió con la presidenta en la casa de gobierno.
Afuera en un multitudinario acto que mezcló coplas y música del altiplano, luego de varios testimonios cargados de profunda emoción y bronca, se leyó el documento consensuado en el que aparte de reclamar por la titulación de las tierras en donde viven, y siguiendo una tradición cultural, en defensa de lo que ellos llaman la Pachamama, la tierra.
Expusieron como punto principal la prohibición de la actividad minera a cielo abierto, el uso de contaminantes industriales en las actividades agrícolas y exigieron al Gobierno que preserve los glaciares.


Milagros Salas, titular de la organización social Tupac Amaru, participó y fue reconocida por otros miembros de las comunidades como una persona fundamental para que la marcha y la reunión con la presidenta haya sido posible.
En su discurso de cierre del acto, luego de la reunión en la casa rosada, se refirió también a la necesidad de preservar la Pachamama.



En la reunión se acordó crear una mesa de dialogo con los respectivos ministros que intervienen en cada punto del documento que los pueblos originarios presentaron a partir del 1ro de junio, pero no consiguieron llevarse respuestas concretas.


Una macha histórica por la reivindicación indígena camino a una nación plurinacional, con reconocimiento sincero de que también una parte nuestra pertenece a algún pueblo originario, y que esa Pachamama, la tierra en la caminamos, con la comemos, y por donde fluye el agua que tomamos, también es nuestra. No dejaremos de ser condenados sino la defendemos.


*FOTO: DANIEL GARCIA / AFP  

 

domingo, 30 de mayo de 2010

Fuente de vida (y de muerte)

En muchos artículos, manuales y enciclopedias hemos leído cientos de veces la frase fuente de vida, como un lugar común, para referirse a las bondades del agua. ¿Pero qué tan cierto es aquella sentencia? En rigor, es tan cierta como relativa, pues todo aquél que padece la falta de acceso bien podría decir que el agua es fuente de muerte.
En este mundo en desarrollo en que vivimos, la mayoría de la población no tiene agua corriente. Son cerca de 2.500 millones de personas, en todo el mundo, las que no cuentan con un baño o una letrina.
Sin sanidad e higiene, las fuentes de agua pueden contaminarse. La gente, al beber, puede contraer enfermedades vinculadas con el agua, como por ejemplo el cólera. Las heces, sin demasiadas complicaciones, son capaces de llegar al agua potable. Una pieza de materia fecal contiene 1.000 millones de virus y 10.000 bacterias en su composición.
La diarrea mata a 4.100 niños por día; un 90% por debajo de los 5 años. Los niños que beben agua no potable, a menudo, llevan 1.000 gusanos con parásitos en sus cuerpos en un momento dado. Cada año, 443 millones de días escolares se pierden debido a la diarrea y las enfermedades relacionadas con el agua.
El siguiente video explica de modo muy gráfico cuán desprotegida se encuentra una gran proporción de los habitantes del planeta. O sea, hombres, mujeres y niños.



Mauro Maciel

lunes, 17 de mayo de 2010

Aceleración de alimentos

La presencia de alimentos transgénicos resulta cada vez más evidente. Respecto del año 2004 los cultivos transgénicos crecieron un 20 por ciento y ya cubren algo más del cinco por ciento de las tierras destinadas a la agricultura. Tal avance se advierte también en países pobres o en vías de desarrollo (en especial China y la India) y ya no es un comportamiento exclusivo de los países industrializados.

En la actualidad, son las producciones de soja, maíz, algodón y colza, las que lideran la modalidad transgénica y que en forma inevitable se traslada a la alimentación. La globalización del comercio, la contaminación natural o accidental y la complejidad de los circuitos agroalimentarios hacen de los esfuerzos, por mantener a salvo las redes de distribución, un ejercicio casi inútil.

Fuera de los productos garantizados, sin organismos genéticamente modificados, y elaborados a un alto costo, los alimentos por todos consumidos contienen ingredientes genéticamente modificados. Este hecho es recocido por Europa, que autoriza su presencia bajo la obligación de que figure en sus etiquetas la información correspondiente, siempre que el contenido de transgénicos sea superior al 0,9 por ciento del producto.

El consumidor entonces se encuentra en una situación nada sencilla. Es por ello que sus posibilidades de formarse una opinión, a partir de argumentos contradictorios de especialistas, genera grandes dificultades. La duda en relación al medio ambiente sitúa en veredas opuestas a ecologistas, productores y (también) científicos.

Por otra parte, también aparece en el foco de la discusión los beneficios económicos. La proliferación de ciertas plagas o insectos, como la chinche del algodón, en Sudáfrica, ha reducido en ciertas ocasiones al nivel cero los provechos esperados de semillas cuyas patentes resultan muy costosas para los pequeños productores. Otra de las consecuencias negativas es la dependencia creciente de los países pobres respecto de compañías multinacionales como Monsanto o Bayer.



Mauro Maciel

domingo, 9 de mayo de 2010

Ahora la basura es mía

La enorme cantidad de residuos que cada jornada continua con su proceso de expansión representa un importantísimo desafío, tanto para la sociedad de consumo como para las autoridades de los países en el mundo entero.
Uno de los problemas más difíciles de resolver al respecto, se compone de tres variables que en su conjunto agudizan la situación.
En primer lugar existe un cada vez más acelerado proceso de crecimiento demográfico, estimado en 9.000 millones de habitantes, hacia mediados del siglo XXI; en segundo orden, aparece la suba del consumo como el principal beneficiario de aquel aumento poblacional; por último, y como consecuencia de los dos primeros, los productos industriales tienen, en promedio, un ciclo de vida más breve.
De acuerdo a los escasos datos estadísticos, correspondientes a 50 países pertenecientes a la Convención de Basilea, el volumen de residuos en movimiento pasó de 2 millones de toneladas, en 1993, a 8,5 millones, en 2001.
Fue en el correr de los años 80, del siglo pasado, que las normas de protección del medio ambiente en los países de mayor desarrollo se vieron reforzadas en forma considerable.
Esto impulsó el tráfico de residuos a otras latitudes (en especial hacia África). A fines de la década, la firma de acuerdos entre países obligó a abandonar el transporte hacia los países del Sur y se dirigieron los residuos con destino al Este europeo, para regresar pronto a los propios países productores.

La razón principal de este cambio de estrategia fue el descubrimiento de un mercado potencialmente atractivo, que es el tratamiento de los residuos peligrosos y que, de esta manera, pasaron a formar parte de una solución rentable al problema comercial.

Mauro Maciel

lunes, 3 de mayo de 2010

Explosión y derrame en Luisiana

La explosión de la plataforma submarina el pasado 20 de abril, en el Golfo de México, podría necesitar tres meses de trabajo para encontrar una solución definitiva, según indicó el secretario de Interior de Estados Unidos, Ken Salazar.
El plan de contingencia supone la construcción de un pozo alternativo, a través del cual se inyectará un líquido de volumen más espeso que el petróleo que impediría a éste último seguir escapando a la superficie. Es decir, que el líquido inyectado cumpliría el papel de tapón de bloqueo para evitar que el desastre ecológico continúe aumentando. Su construcción se llevaría a cabo a casi 5 kilómetros del fondo océanico.
Los datos oficiales, compartidos con British Petroleum, la compañía que tiene a su cargo la concesión de la plataforma, aproximadamente unos 800 mil litros de petroleo serían vertidos al mar cada día. Sin embargo, expertos en el tema consideran que el número sería bastante mayor y se encontraría cerca de los 4 millones de litros.
El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, dio la orden de destinar "todos los esfuerzos y recursos posibles durante el tiempo que sea necesario", a los fines de atenuar las consecuencias que producirá el derrame. A su llegada a Venice, en el estado de Luisiana, asumió el compromiso de "preservar a uno de los hábitats más maravillosos del mundo". No obstante, ha advertido también que la empresa británica pagará por lo sucedido.
La mancha, cuyo tamaño alcanza una superficie cercana a los 10 mil kilómetros cuadrados, ha comenzado a cubrir con petróleo a las aves y podría desplazarse, a través de corrientes marinas, hacia el sur de la Florida.



La plataforma Deepwater Horizon causó la muerte de 11 trabajadores y dos día más tarde de la explosión se hundió bajo el mar. El presidente de British Petroleum, Lamar Mc Kay, defendió a las medidas de seguridad de su compañía y aseguró una pronta respuesta, a la vez que confirmó que una falla de equipo fue la causa del la explosión.
Mientras tanto, el daño no se detiene y las consecuencias en el ecosistema podrían ser irreparables, para el día que llegue la solución.

Mauro Maciel